El apostolado Llamados es un espacio de acogida y formación para quienes desean profundizar en la espiritualidad ignaciana y en la vida comunitaria. Su propósito es:
Los encuentros se llevan a cabo en diferentes espacios comunitarios, mientras que las reuniones de pequeña comunidad se realizan en las casas de los integrantes de LLAMADOS, organizados en dos comunidades que se reúnen los lunes y miércoles de cada mes.
Se realizan una vez al mes, los sábados o domingos por la mañana. En ellos se abordan temas fundamentales de la espiritualidad ignaciana y la vida comunitaria, con la guía de jesuitas. Hasta la fecha, hemos llevado a cabo tres encuentros formativos con gran acogida.
Los participantes se reúnen mensualmente en grupos reducidos, siguiendo el modelo de un grupo base CVX. Estos encuentros, de dos horas y media en horario nocturno, giran en torno a tres ejes: Espiritual, Comunitario y Apostólico. Nos apoyamos en las guías de comunidad de CVX y otros recursos ignacianos. Cada grupo se encarga de organizar el espacio, la oración, la formación y la convivencia. Además, un grupo de LLAMADOS realizó un retiro de oración en silencio de un día de duración.
Cuatro veces al año, organizamos jornadas de oración abiertas a toda la comunidad, donde los participantes profundizan en su relación con Dios a través de la espiritualidad ignaciana. Hemos realizado dos jornadas con la participación de integrantes de LLAMADOS y personas interesadas en fortalecer su vida espiritual.
Este apostolado ha permitido a sus integrantes:
Llamados, es un camino de fe, encuentro y crecimiento en comunidad.
¡Te invitamos a ser parte de esta experiencia transformadora!
La Jornada de Oración Ignaciana es un espacio de oración y silencio
Guiada por el método ignaciano, esta jornada ofrece una orientación espiritual que ayuda a sumergirse en la oración, la contemplación y la escucha interior. A través del silencio, la meditación y la reflexión, los participantes pueden experimentar una renovación en su fe y un buen espacio de oración y encuentro.
Este espacio está abierto para todos aquellos que anhelan un espacio de paz, un encuentro con su espiritualidad o simplemente una oportunidad para reconectar con Dios en la quietud. La Jornada de Oración Ignaciana se convierte en un verdadero encuentro transformador personal